Seguimos con el “Mes Megan Maxwell”. En este cuarto día de reseñas, nos lanzamos con “¿Y si lo probamos…?”, una novela que fue publicada en Junio de 2022 y tiene 496 páginas divididas en 61 capítulos y un epílogo muy ágiles de leer.
Sinopsis
¡Hola!
Me llamo Verónica Jiménez, tengo treinta y ocho años y soy una mujer independiente, trabajadora, autónoma y, según dicen quienes me conocen, bastante cabezota y controladora. Vale, lo confieso, lo soy. Pero ¿acaso hay alguien perfecto?
Yo era de las que creía en princesas y príncipes, hasta que el mío se convirtió en un sapo y decidí que el romanticismo no era para mí. Así que para horror de quienes me rodean, me impuse tres reglas para disfrutar del sexo sin compromiso.
La primera: no enrollarme nunca con hombres casados. Soy de las que respetan y jamás hago nada que no me gustaría que me hicieran a mí.
La segunda: el trabajo y la diversión nunca han de mezclarse. No no. ¡Ni loca!
Y la tercera, pero no por ello menos importante: siempre con hombres menores de treinta años. ¿Por qué? Pues porque sé que ellos van a lo mismo que voy yo: ¡a disfrutar!
Te aseguro que hasta el momento estas normas me han dado muy buenos resultados. Sin embargo, en uno de mis viajes de trabajo he conocido a Naím Acosta, un hombre de unos cuarenta, seguro de sí mismo, atractivo, sexy y tremendamente romántico, que me está volviendo loca.
Es verlo y el corazón se me acelera. Es oír su voz y toda yo me acaloro. Es pensar en él y noto que en mi estómago corren elefantes en estampida. Sé que somos muy diferentes, pero los polos opuestos se atraen, y nosotros no paramos de chocar, y probar y… y… y…
Bueno, mejor me callo, dejo que leas y cuando termines ya me dirás si tú habrías probado… ¿O no?
Opinión personal
En este primer libro, conoceremos a Verónica, nuestra protagonista, que nos cuenta la historia en primera persona y a Naím nuestro co-protagonista.
Los personajes están muy bien perfilados, tanto que al final terminas conociendo y empatizar con ellos. Verónica es una mujer fuerte, luchadora, independiente y con las ideas muy claras, ya que desde muy joven tuvo que luchar y esforzarse para labrarse su futuro gracias a la ayuda de su familia y amigos. Naím es un hombre frío, cabezota y familiar, y al igual que a Verónica es muy libre respecto al sexo.
Los personajes secundarios, son casi tan importantes en este libro como los protagonistas ya que sin ellos, el desarrollo de la historia no sería igual.
Los que seguimos a Megan sabemos el tipo de historia que nos vamos a encontrar (a mí en particular, me encanta) porque siempre sigue una misma línea. La pluma de ésta autora como siempre es muy cercana, ágil, sencilla y muy adictiva por lo que a pesar de sus casi 500 páginas, es un libro ameno que te engancha desde la primera palabra hasta la última.
«La única manera de coger un buen tren a tiempo, es habiendo perdido el anterior»
¿Y si lo probamos…? – Megan Maxwell
Algunas personas de mi entorno, dirían que no soy muy imparcial respecto a ésta autora, ya que es de la que tengo más libros y me enamoro de cada novela suya, pero yo creo que es porque cada personaje que escribe, lo describe con el mismo cariño como si fuera un amigo suyo de toda la vida y nos da a los lectores la posibilidad de conocerlos.
En resumen, una lectura entretenida llena de amor, amistad, familia y escenas subidas de tono. Como dije al principio, hay un segundo libro que sigue contando la historia de estos personajes, pero será en otro post.